Cementerio General

Gladys del Carmen Marín Millie

Gladys Marín Millie nació el 16 de julio de 1941 en Curepto, Chile. Desde joven, mostró un fuerte compromiso con la política y la justicia social, lo que la llevó a militar en el Partido Comunista de Chile (PCCh) a los 16 años. Su vocación la llevó a estudiar pedagogía en castellano en la Universidad de Chile, y rápidamente se destacó como líder en el ámbito estudiantil.

En 1965, con solo 24 años, fue elegida diputada por el Tercer Distrito de Santiago, convirtiéndose en una de las parlamentarias más jóvenes del país. Desde su cargo, defendió los derechos de los trabajadores, campesinos y sectores más vulnerables, consolidándose como una figura influyente dentro de la izquierda chilena.

Lucha contra la dictadura y exilio

Tras el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, que derrocó al gobierno de Salvador Allende, Gladys Marín pasó a la clandestinidad debido a la persecución de los opositores al régimen de Augusto Pinochet. Su esposo, Jorge Muñoz, fue detenido y desaparecido por la dictadura, lo que marcó profundamente su vida.

En 1974, se exilió en la Unión Soviética y otros países, donde continuó su lucha política denunciando las violaciones a los derechos humanos en Chile. En 1978, decidió regresar clandestinamente al país para reorganizar la resistencia comunista y coordinar acciones contra la dictadura, convirtiéndose en un símbolo de valentía y compromiso inquebrantable.

Liderazgo en el Partido Comunista y lucha democrática

En 1994, Gladys Marín asumió el cargo de secretaria general del Partido Comunista de Chile, y en 2002 fue elegida presidenta del partido. Bajo su liderazgo, el PCCh intensificó la lucha por la justicia y el fin de la impunidad de los crímenes de la dictadura.

En 1999, se presentó como candidata presidencial en las elecciones de 1999-2000, siendo la primera mujer en la historia de Chile en postularse para el cargo. Aunque obtuvo un 3,19% de los votos, su candidatura simbolizó la persistencia de la izquierda en un contexto político donde el sistema binominal limitaba su representación.

Últimos años y legado

En 2003, se le diagnosticó un tumor cerebral, lo que la llevó a someterse a tratamientos médicos en Cuba y Suecia. A pesar de su enfermedad, continuó participando activamente en la política y en manifestaciones públicas hasta sus últimos días.

Gladys Marín falleció el 6 de marzo de 2005, a los 63 años. Su funeral reunió a miles de personas que la despidieron como una de las figuras más importantes de la historia política chilena. Sus restos descansan en el Cementerio General de Santiago, en un mausoleo que se ha convertido en un lugar de homenaje para quienes siguen su legado de lucha por la justicia social, los derechos humanos y la igualdad.

Su legado sigue vivo en el movimiento social y político chileno, siendo recordada como una mujer que nunca dejó de luchar por sus ideales y por un país más justo.

La sepultura de Gladys Marín se encuentra ubicada en el Patio 50 de nuestro cementerio. Para facilitar su visita, le invitamos a utilizar la opción de Ubicación.